Metaverso en Asia: los operadores de telecomunicaciones intensifican las inversiones

Su colaboración podría llegar a fusionar sus dos metaversos en el futuro (Ifland para SKT y XR World para NTT Docomo), ya sea industrial, empresarial o recreativo. Una parte esencial de Web3 junto con blockchain, NFT y criptomonedas, el metaverso ha sido un tema muy debatido durante más de un año. Ya sea una palabra de moda o no, los gigantes tecnológicos están invirtiendo enormes cantidades de dinero en ella, encabezados por Meta, cuya inversión de $ 3 mil millones en el primer trimestre de 2022 aún no ha dado frutos.

El crecimiento observado en los ingresos de los operadores de telecomunicaciones de Asia oriental ha ido disminuyendo en los últimos años tras el aumento de la competencia y la saturación progresiva del mercado. Mediante la combinación de sus servicios de conectividad con ofertas de contenido, han buscado aumentar el ARPU, el compromiso y reforzar el enlace directo a clientes mientras reduce las tasas de abandono.

Por lo tanto, las oportunidades de participar en el metaverso pueden verse como una continuación natural de su participación en la provisión de servicios de video y posicionamiento como puertas de entrada para el contenido. Dado que los mercados de Asia oriental encabezan la actualización de las redes móviles a 5G, las iniciativas relacionadas con el metaverso allí pueden allanar el camino para los operadores a nivel mundial.

Hasta ahora, las estimaciones del tamaño futuro de su mercado han sido bastante inciertas, pero demasiado grandes para ignorarlas. Los operadores de telecomunicaciones no pueden permanecer indiferentes ante las previsiones de 8 billones de dólares para el único mercado virtual chino (Morgan Stanley), o 13 billones de dólares para el mercado global del metaverso, que reunirá 5.000 millones de usuarios en 2030 (Citibank). En consecuencia, se les incentiva a invertir incluso sin una posición clara en la cadena de valor, simplemente para evitar que los gigantes tecnológicos los excluyan de ella. Hasta ahora, la conectividad y la agregación de contenido han sido las áreas clave de enfoque para ellos, siendo los ámbitos más cercanos a su negocio principal.

En este contexto, proliferan las iniciativas, sobre todo gracias a autoridades proactivas ya un entorno macroeconómico favorable. En China, donde el RMB digital ha sido el competidor estratégico de la hegemonía del dólar estadounidense, el metaverso es una posible puerta de entrada importante para extender su uso a otros países, más aún desde que el gobierno prohibió las criptomonedas privadas en 2021.

Dado que los consumidores chinos utilizan ampliamente los pagos digitales y están acostumbrados a la cultura de las propinas de los fanáticos, los operadores móviles están en una posición deseable para sacar provecho de este mercado alcista. Corea y Taiwán no disfrutan de un tamaño de mercado tan grande, pero se benefician de una base de clientes altamente receptiva, lo que puede otorgarles tasas de aceptación mucho más altas que sus contrapartes en el extranjero.

Además, el Ministerio de TIC de Corea estableció una alianza de metaverso que incluye a SKT, KT y Samsung, entre otros, en mayo de 2021. En comparación, el apoyo estatal japonés va a la zaga, ya que el primer ministro Fumio Kishida, quien creó la Agencia Digital de Japón en septiembre de 2021, más bien fomenta la implementación de Web3 en su conjunto. Dicho esto, KDDI ha estado operando el metaverso de Shibuya en asociación con las autoridades locales desde mayo de 2020 y NTT Docomo, que invierte mucho en el metaverso, pertenece a NTT, cuyo tercio está en manos del gobierno japonés.

Impulsados ​​por las autoridades públicas, los operadores ya han llevado a cabo algunos proyectos para tratar de asegurar un punto de ventaja en la cadena de valor, que se puede dividir en cuatro capas: tecnologías de acceso (hardware VR/AR), aplicaciones, plataformas de soporte tecnológico (por ejemplo, motores mundiales, IA) e infraestructuras tecnológicas. Esta última capa es la más cercana al negocio central de los operadores de telecomunicaciones.

Además del aumento esperado de la demanda de servicios de conectividad, en particular con respecto a la baja latencia, el metaverso requerirá una enorme potencia informática, que los operadores podrían operar parcialmente junto con los proveedores de infraestructuras en la nube. Se requerirán centros de datos de borde adicionales, de ahí el plan de infraestructura de China Unicom para respaldar la mejora de la potencia informática y el proyecto de integración de la red en la nube de China Telecom.

Más allá de la conectividad, los operadores ya comenzaron a ingresar a la tercera capa, ya sea a través de inversiones o desarrollos internos. El último ejemplo es el de la unidad T Universe de SKT y su plataforma de metaverso Ifland, lanzada en julio de 2021. Recientemente se expandió a 49 países y ya reúne 3,6 millones de MAU, 12 veces lo que Meta reporta para su plataforma Horizon Worlds.

Ifland presenta experiencias XR ofrecidas por socios de SKT, que se compilan en planes de suscripción administrados por SKT. Por lo tanto, SKT es el agregador y curador de XR, un rol con el que los operadores de telecomunicaciones ya están familiarizados. Por el contrario, SoftBank ha adoptado una estrategia diferente y ha estado invirtiendo cada vez más en empresas relacionadas con el metaverso durante los últimos dos años.

Las inversiones incluyen la participación en la recaudación de fondos de empresas por valor de 245 millones de dólares en 2021 (como la plataforma de animación DNA Block en septiembre, la plataforma de metaverso Zepeto y el juego de sandbox The Sandbox en noviembre) y 330 millones de dólares en 2022 (para financiar la empresa creadora de avatares Soul Machines en febrero, empresas emergentes de tecnología e infraestructura de metaverso Improbable y Xmov en abril, por ejemplo). De esta manera, SoftBank colocó huevos en varias canastas y se aseguró de ser un habilitador de metaverso en el futuro, sin importar quiénes serán los jugadores principales.

Según el informe de la consultora, algunos operadores como NTT Docomo incluso han ingresado a la capa de acceso a través de inversiones en el creciente mercado de dispositivos AR y VR. Además de desarrollar su propio espacio digital (XR World) en marzo e invertir 412 millones de dólares para lanzar Qonoq, una división específicamente a cargo de operarlo, el operador móvil líder japonés apunta a capturar algo de valor en el lado del hardware. Tanto a través de Qonoq como de su reciente inversión en Hikky ($57 millones), la startup que opera Vket y que también produce internamente sus propios dispositivos de hardware, NTT Docomo ha comenzado a asegurar un punto de vista para garantizar flujos de ingresos futuros. Por lo tanto, estuvo más cerca de convertirse en el futuro centro donde se reúnen todas las partes interesadas: proveedores de tecnología, proveedores de experiencia XR, consumidores, reguladores.

Sin embargo, para convertirse en tales centros, los operadores deben alcanzar una escala masiva, lo que requiere un poder de inversión sustancial. Esta es una de las razones por las que han surgido tantas colaboraciones. En noviembre de 2021, la Asociación de Comunicaciones y Móviles de China (CMCA), que es responsable de establecer las normas en la industria de las comunicaciones móviles, fundó el Comité de la Industria del Metaverso para expandir su cobertura al metaverso y estudiar sus potencialidades. Mientras tanto, las iniciativas individuales solo son posibles para los operadores de nivel 1: China Telecom tiene una subsidiaria dedicada a cargo del negocio del metaverso (Best Tone), y Migu de China Mobile acaba de lanzar una transmisión en vivo basada en el metaverso para la Copa Mundial de la FIFA, después del lanzamiento de un primer producto gemelo digital a principios de este año.

Bajo la presión tanto de las iniciativas públicas como de los gigantes tecnológicos, los operadores de telecomunicaciones se ven obligados a actuar rápidamente para participar en el proceso de creación conjunta del metaverso. La alta incertidumbre y el tamaño de las inversiones requeridas obligan a los rivales a colaborar, y la mayoría de sus iniciativas son demasiado recientes para haber dado frutos. A pesar de tener menos poder de inversión que los gigantes tecnológicos, los operadores han comenzado a moverse para aprovechar sus ventajas competitivas.

 Más allá de la comprensión profunda de los clientes y su vínculo directo establecido desde hace mucho tiempo con ellos, los operadores se benefician de una imagen de marca sólida que les da una ventaja sobre los gigantes tecnológicos para obtener la confianza del consumidor, especialmente en lo que respecta a la privacidad de los datos y los problemas de ciberseguridad. Eso puede explicar por qué Meta se ha asociado con Verizon y Telefónica para desarrollar su propio metaverso.